Hoy una receta que se me ocurrió el otro dia cuando, en uno de mis arrebatos, se me antojó comer canelones, pero con este calor... encender el horno es lo que menos apetece, asi que rebusqué y con lo que encontré en el frigorífico preparé estos fresquitos canelones.
Ingredientes:
- 6 placas de canelones
- 10 palitos de cangrejo
- 10 palitos de cangrejo
- 2 huevos duros
- Un trozo de bonito en escabeche
- Un poco de queso rallado para decorar
Para la mahonesa:
- 1 huevo
- Un vaso de aceite
- Una pizca de sal
- Un chorrito de vinagre blanco
Elaboración:
Ponemos a cocer las placas en una cazuela con agua, sal y un chorrito de aceite siguiendo las instrucciones del fabricante en cuanto al tiempo de cocción.
Mientras, picamos y mezclamos todos los ingredientes y los reservamos en un bol.
Nos disponemos a hacer la mahonesa, naturalmente podemos usar una de las muchas que podemos adquirir en cualquier supermercado, pero para estas cosas, a mi, me gusta hacerla casera, aunque ahora en verano tendremos que tener mucho cuidado si no pensamos gastarla toda de una vez.
Ponemos el huevo en el vaso de la batidora y añadimos el aceite, comenzaremos con la batidora inmovil en el fondo del vaso, cuando veamos que el huevo y el aceite comienzan a ligar, empezaremos a hacer con la batidora pequeños movimientos verticales cada vez más pronunciados, hasta que tengamos la salsa completamente ligada. En este momento añadiremos sal y vinagre al gusto.
Una vez que la pasta este cocida, la escurriremos y mantendremos en agua fria hasta que baje su temperatura. Mientras, añadiremos una parte de la mahonesa (esto ya al gusto de cada uno) a la mezcla picada que tenemos reservada.
Secaremos con un trapo limpio las placas de pasta y las rellenaremos con el picado. Colocamos todos los canelones en una fuente, les ponemos la mahonesa por encima y los decoramos con un poco de queso rallado (yo puse queso en polvo).
Listo, los metemos al frigorífico durante un par de horas y listos para comer.